lunes, 6 de noviembre de 2017

Más Calvarios


A raíz de algunos comentarios recogidos entre los vecinos, sumado al texto donde resumimos nuestras posiciones en relación a las obras llevadas en el Calvario, queremos dar algún detalle e información más concreta al respecto.


Nuestro grupo Ganar Híjar se ha manifestado desde el principio con cierto “agnosticismo”, si se me permite la metáfora, en relación a las obras del Calvario. Para cualquier despistado os recuerdo un artículo de este mismo blog donde exponíamos nuestras inquietudes y opiniones al respecto, por no hablar de costes exagerados que deberían revertir en proyectos de mayor interés común:




También hemos insistido en muchas ocasiones que la política es el arte de priorizar una cosa sobre otra. Según el partido o el grupo, se priorizan unas u otras cosas según el bien común o los intereses grupales o particulares.


Que el Calvario sea casi la única prioridad del equipo de gobierno desde hace muchos años no es por tanto una curiosidad o casualidad, es una prioridad que ellos estiman importante para el pueblo. Que los talleres de empleo, unidos a los programas de Garantía Juvenil, unidos a los fondos del FITE se dediquen con tanta profusión al Calvario y a sus jardines (a ver cómo se gestiona después su mantenimiento..) responde por tanto al interés del grupo de gobierno y, suponemos, de gran parte de sus votantes. Otra cosa sería analizar el afán protagonista de los jardines en el ámbito municipal desde hace años. Aunque quizás para ello habría que hacer una investigación más amplia sobre los intereses e interesados. A eso ya volveremos otro día.


Cuando Ganar Híjar se pronunció sobre el Calvario, se intentó que en los ejercicios presupuestarios se priorizaran otras obras e inversiones. Del mismo modo, desde el grupo del PSOE se ha intentado por activa y por pasiva reactivar de alguna manera la construcción de la residencia.


El Calvario es la propuesta. Por el volumen de inversión, casi la única propuesta. Es por tanto la opción, la prioridad del esquipo de gobierno.


Tampoco es extraño que, a nuestro artículo en el blog de junio de 2016  respondiese una trabajadora de la empresa contratada para realizar el Calvario, contándonos todos los parabienes de la obra y la excepcional gestión, a su entender, al impulsar una obra que ya veremos dónde nos lleva –esperamos y deseamos que por el buen camino-. La empresa, o su trabajadora para el caso, haciendo de política del gobierno municipal, todo un clásico por otra parte en ciertos partidos.


La gestión del alcalde es la que es. Centrado en su carrera en Teruel y dejando aquí a concejales sin capacidad de decisión, es difícil hacer un seguimiento y una gestión correcta de los fondos, programas y actuaciones que el ayuntamiento realiza. No queremos decir con esto que no se trabaje por el pueblo, ni mucho menos, simplemente, como decíamos al comienzo de este artículo, que se priorizan unos intereses sobre otros. Y de ese modo es fácil que en algún momento nos pille el toro de la justificación.


Como todo el mundo sabe, supuestamente, se debe de justificar y pagar una obra al término de la misma. Como todo el mundo sabe muchas veces los plazos se echan encima. Como todo el mundo sabe, si no se está encima de la obra y de la gestión diaria las obras se pueden eternizar, corriéndose el peligro de perder subvenciones o incluso de pagar actuaciones que no se han realizado. También podría darse el caso de pagar dos veces por la misma actuación.


En la entrada que resumía el último pleno así lo manifestábamos:

“El siguiente punto del orden del día era la Dación de cuenta de los Decretos de Alcaldía.  Uno de los decretos se refería a la obra de rehabilitación de la Casa del Hijarano, en él se aprueba y dispone el gasto, así como se ordena el pago final de la obra.

 Ganar Híjar preguntó si se había realizado dicho pago a la empresa que realiza la obra así como al arquitecto redactor del proyecto, se nos contestó que sí.

Quisimos dejar constancia en el acta del pleno que no entendemos cómo se puede pagar una obra que está sin acabar y a la que le faltan varias semanas todavía para estarlo.

Preguntamos si se iba a penalizar a la empresa por pasarse del plazo de entrega, concretamente éste era el 30 de septiembre de 2017, y cómo iba a hacerse si ya estaba pagada la obra.  El equipo de gobierno nos dijo que la posible penalización la tienen que valorar el técnico redactor del proyecto y la arquitecta municipal, la penalización se descontará de la fianza que entrega la empresa al comenzar la obra.

Esta obra está subvencionada con un Fite 2016 que se nos adjudicó en noviembre de 2016, no entendemos cómo se ha podido llegar a esta situación después de 11 meses.  Pedimos que se valore la penalización a la empresa por su responsabilidad técnica y dejamos claro que la mala gestión del equipo de gobierno ha sido la responsable de llegar con la obra inacabada a estas alturas.”


Correr ciertos riesgos ha sucedido muchas veces, casi se podría decir que sucede con demasiada asiduidad. Preguntábamos por tanto cómo se podía pagar algo que creíamos que no estaba acabado, y se nos contestaba, desde la Secretaría y el equipo de gobierno, que los técnicos municipales habían certificado la obra. Poco más se puede esperar de nuestro grupo municipal, como espero que puedan comprender. Algo más quizás del equipo de gobierno, como también pueden comprender, pues para eso están. Depurar responsabilidades debería de ser un común en este tipo de gestiones, de ahí que entendamos que se debe valorar al menos las penalizaciones.


El Calvario sigue siendo prioridad. Y en las prioridades de los que gobiernan no entran las explicaciones pormenorizadas a la oposición, que ejerce la misma con mucho tiento (me atrevería que decir, muy a pesar mío, que con demasiado tiento, pues no nos queda otro remedio). Así nos madrugamos de vez en cuando con negociaciones que el Ayuntamiento lleva con empresas privadas para gestionar el Calvario, pero desconocemos todo. Difícilmente se puede opinar, aportar o contraponer soluciones. Ahora nos informan que para abrir el restaurante sería deseable quitar el antiguo almacén de peanas y hacer otro nuevo. El presupuesto, solo memoria valorada, llega casi a los 300.000 euros. Conociéndonos, llegaremos o brincaremos los 400.000. Sigan sumando en la prioridad del Calvario y estudien cuál es la suya o cuál podría ser la mejor para el pueblo.


La política, como la vida, es cuestión de priorizar. Aunque es más fácil priorizar, opinar y pensar si se conocen los datos, los números, las razones, las necesidades y las propuestas de futuro.



Víctor Guiu, portavoz del grupo municipal de Ganar Híjar

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