La despoblación hace que poco a poco nuestra población esté más envejecida y que muchos jóvenes dejen progresivamente de involucrarse en la vida cotidiana y en los proyectos de nuestros pueblos.
Hay dignas excepciones, desde luego, pero creemos que el trabajo con la juventud es la mejor inversión de futuro. Así lo hemos hecho saber y así lo hemos propuesto año tras año cuando se planteaban los presupuestos municipales. Y así lo hemos luchado en la Comarca, entendiendo que la comarca solo es una muleta más, pero necesitada irremediablemente de la actuación municipal para que salga adelante.
Hay que tener la puerta abierta siempre, pero hay que trabajar para educar a los jóvenes en la necesidad de comprometerse con las cosas grandes y pequeñas del pueblo.
Así lo manifestaba el CEBM, por citar solo un ejemplo, en palabras de Miguel Barrera cuando la asociación fue candidata a los Bajoaragoneses del Año por el periódico La Comarca.
No queda otra. Hay que remar juntos y junto a la juventud... o intentarlo al menos.
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